Un Juzgado de Madrid ha acordado la puesta en libertad de los tres detenidos por retener y maltratar supuestamente a una joven rumana de 19 años durante meses en una vivienda ilegal del poblado chabolista de la Cañada Real, que son la pareja de la víctima y dos familiares de este.

Así lo ha decidido la jueza de Violencia Sobre la Mujer número 1 de Madrid, que no obstante les mantiene como investigados por la supuesta comisión de los delitos de malos tratos, detención ilegal y amenazas, tal y como ha denunciado la víctima, informa el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

La magistrada les ha impuesto la obligación de comparecer en el Juzgado en cualquier momento en el que sean llamados durante la investigación judicial. Las tres personas fueron detenidas en una operación que tuvo lugar durante la tarde del pasado día 6, tras recibirse una alerta de la Agregaduría de la Embajada de Rumanía en España por la situación de maltrato que podría sufrir la joven en Madrid, a raíz de una denuncia interpuesta por su madre el pasado 31 de diciembre.

Los agentes llamaron al móvil de la joven y una persona les contestó, en castellano, que estaba bien y no necesitaba ayuda policial, pero los policías sospecharon que no era ella y continuaron las pesquisas.

Tras varias averiguaciones sobre el posible paradero de la víctima, los agentes se desplazaron a una vivienda del sector 2 de la Cañada Real, en el distrito madrileño de Vicálvaro, para comprobar su estado.

Una vez allí, los residentes de la misma, que resultaron ser la pareja de la mujer y dos familiares de este, negaron inicialmente conocer a la víctima, quien posteriormente fue localizada por los agentes escondida en la cocina. Por ello, detuvieron a su pareja y a los dos familiares que estaban con él, un hombre y la mujer que se había hecho pasar por la víctima ante la llamada de los policías.

La víctima manifestó a los policías que llegó a España en febrero de 2019, después de iniciar una relación sentimental con un compatriota de 27 años que residía en Madrid. Habían comenzado y mantenido un tiempo su noviazgo a través de WhatsApp, hasta que la joven decidió trasladarse a vivir con él.

Al llegar a Madrid vio que el hombre vivía con su familia en una zona chabolista y pasados unos meses, sobre mayo, le dijo que quería trabajar para mejorar su situación, pero él se negó y le dijo que tenía que quedarse en casa, por lo que fue coaccionada y comenzó a sufrir malos tratos, y cuando quiso volver a su país tampoco la dejaron.

Le quitaron su documentación personal y su teléfono móvil, que solo le dejaban usar bajo supervisión, no le permitían poseer dinero ni realizar gestiones personales y siempre tenía que ir acompañada por alguno de los detenidos en caso de abandonar el domicilio, para evitar su huida. La mujer fue trasladada para ser asistida por personal médico y recibir protección, ya que no dispone de medios ni conoce a nadie en España.