A sus seis años Ainhara está embarcada en una de las travesías más importantes de su vida. Llegó en plena pandemia a España desde Ecuador para someterse a un tratamiento pionero para su sarcoma cerebral que ha superado con éxito.
De hecho, Ainhara es la primera niña que ha terminado su tratamiento en la nueva Unidad de Protonterapia de la Clínica Universidad de Navarra de Madrid.
Y lo ha hecho con su sonrisa permanente con la que se ha ganado a todo el equipo médico.
La novedad está en que este tratamiento, llegado hace muy poco a España, es capaz de disparar al cáncer dañando lo menos posible a su alrededor y no tiene
efectos secundarios.
La protonterapia evita la irradiación innecesaria de tejidos normales"
Según explica el jefe de la Unidad de Protonterapia de la Clínica, Felipe Calvo, la protonterapia "irradia lo que queremos y evita la irradiación innecesaria de tejidos normales".
Son 30 las sesiones que ha necesitado para dar por finalizada la terapia, aunque tendrá que continuar con el proceso que empezó en su Ecuador natal, donde le extirparon un tumor cerebral complejo.
Ahora, lo que quedaba de él ha menguado y los médicos se han despedido de la pequeña cuya historia ha sido recogida en un documental por el cineasta navarro David Arratíbel.
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