La pequeña Saybie ha sido bautizada como el "bebé del milagro" tras haber superado todas las expectativas sobre su esperanza de vida.

Nació en un hospital de San Diego a los cinco meses de gestación debido a unas complicaciones en la salud de su madre durante el embarazo, según ha recogido 'The Guardian'.

Los médicos no esperaban que la niña más pequeña del mundo, que pesaba 245 gramos al nacer, durase más de una semana. De hecho, era tan pequeña que tuvieron que cortar el tubo de la respiración porque no existían otros de dimensiones tan reducidas.

"Saybie tenía el mismo peso que una manzana o un zumo pequeño", ha explicado Trisha Khaleghi, directora ejecutiva del hospital.

No obstante, tras ocho meses ingresada y cuidada día y noche, Saybie ha conseguido salir adelante y ya pesa dos kilos. Tal es su mejora que el hospital ha decidido darle el alta y ahora se encuentra en casa con su familia casi recuperada por completo.