Pablo Ráez ha dejado el legado propio de un heroico luchador que ha movilizado a toda una generación en la importancia de donar médula. Cuando se cumple un mes de su muerte, sus más allegados siguen con su lucha: seguir trabajando para aumentar las donaciones de médula hasta llegar a un millón.
Aunque esta cifra todavía está lejos de alcanzarse, las donaciones siguen subiendo. Nada más lanzar Ráez su llamamiento, Málaga multiplicó por 40 el número de donantes de médula ósea y en toda España, los donantes aumentaron un 36% en 2016.
El director de la Organización Nacional de Trasplantes, Rafael Matesanz, ha dicho que el sueño de Pablo Ráez de llegar al millón de donantes se pueda conseguir para el año 2020 o 2021. No obstante, ha avanzado que en lo que va de año las donaciones y trasplantes de órganos han crecido en España un 10% con respecto al mismo periodo del año anterior, unas cifras que hacen prever que "2017 acabará con nuevos máximos históricos".
Al respecto, el legado que dejó Pablo Ráez con su lucha para que la donación de médula sea una costumbre cotidiana se ha visto reflejado en la campaña #1MinutoxUnaVida de Adolfo Sánchez, un joven sevillano.
Sánchez, que ha cumplido 16 años, se ha convertido en el protagonista de un campaña que reclama una donación de médula, ya sea de modo concreto para él o para cualquier persona que esté pasando por la situación que él sufre en estos momentos, con la quimioterapia intentando controlar su enfermedad hasta que llegue un trasplante que le haga olvidarla.
