El accidente ha ocurrido hacia las 12.30 horas cuando, por causas que todavía se están investigando, una furgoneta mixta que circulaba por la carretera C-17, que bordea el Ter, se ha salido de la vía y se ha precipitado al río. Sus cuatro ocupantes, un matrimonio y sus dos hijos de 8 y 9 años, han fallecido.
Otras tres personas han sido atendidas por los servicios médicos por presentar síntomas de hipotermia al haberse lanzado al agua para tratar de rescatar a los accidentados. Esas tres personas, que han sido trasladadas a un centro sanitario de Campdevànol, eran ocupantes o conductores de otros vehículos que han presenciado el accidente y han intentado sin éxito socorrer a las víctimas, antes de que llegaran los equipos de emergencias.
Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para aclarar las causas del accidente, en el que de momento solo consta un vehículo implicado, y están investigando la zona donde ha volcado la furgoneta y las marcas que ha dejado en el suelo, así como interrogando a testigos del siniestro.
El accidente ha ocurrido en una carretera con dos carriles, uno por cada sentido de la circulación, que se ha cerrado totalmente al tráfico para permitir la intervención de los equipos de emergencias, lo que ha provocado varios kilómetros de congestión.
Una de las líneas de investigación que baraja la policía catalana es que el coche haya patinado sobre alguna placa de hielo de la calzada, lo que puede haber provocado que se saliera de la vía y se precipitara al agua.
El ayuntamiento ha declarado tres días de luto oficial y las banderas ondean a medio palo.
