Los test se están convirtiendo en una herramienta clave para hacer frente a nuevos contagios en la sexta ola, ya que nos pueden ayudar a cortar la transmisión detectando nuevas infecciones.

Aun así, es necesario conocer su funcionamiento para evitar una sensación de falsa seguridad con un mal diagnóstico. Por eso, explica la neumóloga Olga Mediano, respetar la fase de incubación de la enfermedad es crucial.

"En los primeros días el test de antígenos, y ni siquiera la PCR, va a ser positiva", ha indicado la experta, que ha asegurado que la PCR podría ser positiva a partir del tercer día, mientras que el test de antígeno lo es en el cuarto.

Así, insta a esperar entre tres y cuatro días desde un posible contacto de riesgo hasta la realización de la prueba. No obstante, si existen síntomas, se tiene que realizar cuanto antes.

"Las personas vacunadas comienzan a tener síntomas algo antes. Sobre las 48 horas", ha explicado Mediano, que ha indicado que, en ese caso, es en ese momento en el que deberíamos hacernos la prueba. En realidad, se trata de una respuesta natural, ya que los anticuerpos de la vacuna detectan la entrada del virus.

Además, alerta sobre la posibilidad de falsos negativos: "En los dos primeros días de síntomas, como en muchos casos se empiezan a dar antes porque estamos vacunados, dan negativo".

Olga Mediano también ha lanzado una recomendación de cara a las reuniones por Navidad: en caso de hacerse test, deberían realizarse "lo más cerca posible de la reunión o comida familiar".