El número de residentes extranjeros que adquirió la nacionalidad española aumentó un 36,6% en 2018, hasta alcanzar los 90.774, según los datos de la Estadística de Adquisiciones de Nacionalidad Española de Residentes publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

De este modo, se recupera la tendencia alcista que se perdió en 2017, cuando 66.498 residentes extranjeros la adquirieron. La cifra más elevada se produjo en 2013, con 225.793, que descendió en 2014 hasta los 205.880 y bajó de nuevo en 2015 hasta los 114.351. En 2016, la cifra subió hasta los 150.944.

Cataluña (con 20.103 casos) y la Comunidad de Madrid (con 17.558), concentraron el 41,5% de las adquisiciones de nacionalidad española en el año 2018. Por su parte, Extremadura (672) y La Rioja (724) fueron las comunidades autónomas con menor número.

El grupo más numeroso corresponde a aquellos de origen marroquí, con 15.398 casos. El conjunto de países de África lideran el ranking (20.478) y, a continuación, se sitúan nacionalidades de países sudamericanos y de Centroamérica (en orden, Bolivia, Ecuador, Colombia, República Dominicana, Perú, Cuba, Paraguay y Brasil).

El país de nacimiento más frecuente en las adquisiciones de nacionalidad española fue España, con 17.256 casos.

Entre los nacidos fuera, el país de nacimiento más frecuente fue Marruecos, con 15.367 adquisiciones de nacionalidad, seguido de Bolivia (7.248), Ecuador (7.044), Colombia (6.647), República Dominicana (4.513), Perú (3.168), Cuba (2.661), Paraguay (2.483) y Argentina (1.953).

El 47,1% de las personas extranjeras que adquirió la nacionalidad española en 2018 fueron hombres y el 52,9% mujeres. Por edad, las personas entre 30 y 39 años constituyeron el grupo más numeroso en cuanto a adquisiciones de nacionalidad española.

En cuanto a los modos de adquisición, 69.771 casos fueron por residencia y 20.861 por opción. Esta última modalidad se dio sobre todo en los menores de 20 años.