El arquitecto Joaquín Torres ha sido blanco de las críticas tras instalar en los exteriores de su estudio situado en el centro de Madrid una hilera de barras para evitar que las personas sin hogar duerman y se instalen en ese lugar.

"Aquí hace dos días dormían personas sintecho, tapadas hasta arriba de mantas. Ayer pusieron esto. El presente en el que vivimos es una distopía agresiva y bárbara. Odio eterno a los responsables del encargo de semejante obra. Qué falta hace que se rompa la rueda", denunciaba un usuario en redes sociales.

 

Lo cierto es que el espacio que ahora ha sido rellenado con esas barras suele estar frecuentado por personas sin hogar que se instalan en esos recovecos del edificio para resguardarse del frío. Algo que es un problema para el conocido arquitecto: "Llevamos cuatro años con el problema de los sintecho alrededor del estudio, intentando ayudar y llegar a acuerdos con ellos en la medida de lo posible, pero ha sido poco menos que imposible".

En declaraciones a 'Espejo Público' ha querido puntualizar que no se trata de pinchos sino de "tubos" que llenarán de grava para "intentar pon enésima vez poner un jardín de cáctus".

Torres ha asegurado que la situación de estas personas es "un drama humano" y que han intentado "ayudarlas llamando al Samur Social", pero "ha sido imposible": "Es gente a la que les hemos ofrecido usar los baños del estudio, les hemos pedido llegar a acuerdos en cuanto a horario".

"Vivir en la calle es un drama, pero están metidos en el espacio privado del estudio. Hemos tenido que llamar en más de diez ocasiones a la Policía Municipal para poder abrir el estudio porque no nos dejaban entrar", ha señalado.

Además, ha denunciado que se trata de un "drama" que deben "resolver las instituciones como el Ayuntamiento de Madrid". "Hemos puesto plantas, hemos intentado poner un jardín seco para que no fuera un mantenimiento complicado. Han destrozado todo", lamenta.

"Apelo a la gente que me ha puesto verde a que se lo lleven tres días a su portal y que hagan las necesidades en el portal de su casa y que se les pongan agresivos porque beben alcohol. No quieren ir a un centro de acogida. Lo hemos intentado todo", ha explicado.