El kamikaze que acabó con la muerte de Víctor, un joven madrileño de 20 años, en la carretera M-50, se ha negado a declarar ante la Guardia Civil y ha quedado en libertad acusado de un delito contra la seguridad vial, según ha informado su abogado al diario El País.

Ahora es el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Coslada el que tendrá que decidir los delitos que se le imputan y si lo envía a prisión provisional. Todo indica que será acusa de un delito de homicidio imprudente y otro contra la seguridad vial.

El kamikaze que acabó con la vida de Víctor al conducir en dirección contraria sufrió importantes lesiones tras el fuerte impacto. Además, el detenido dio positivo en alcoholemia.

El siniestro se produjo a las 6.39 de este domingo en el kilómetro 25 de dicha carretera de circunvalación, en el límite municipal entre Madrid y Coslada. En ese momento, el vehículo kamikaze chocó frontalmente contra el otro.

Los Bomberos de la Comunidad de Madrid tuvieron que rescatar el cuerpo del fallecido, de 20 años, único ocupante del vehículo, que había quedado atrapado en su interior.

El conductor kamikaze, identificado como un joven de 35 años, sufrió un traumatismo ortopédico en el brazo y, tras ser estabilizado en el lugar de los hechos, fue evacuado hasta el Hospital Gregorio Marañón de la capital.