Los hechos ocurrieron en Dallas, Estados Unidos, en 2012, cuando una menor de sólo 13 años fue violada por su propio hermano de 24. Ambos vivían con su tía, que ante la posibilidad de que los servicios sociales le retiraran la custodia de los jóvenes, intentó forzar el aborto antes de avisar a las autoridades.

Entonces, obligaron a la joven a tomar píldoras anticonceptivas para forzar su aborto, y al ver que esa medida no funcionaba, tres miembros de la familia se unieron para darle una tremenda paliza con golpes en el vientre.

"La sujetaron y la obligaron a permanecer tumbada en el suelo mientras la gente la pisoteaba. Fue salvaje", explicaron el juicio.

Tras la paliza, dejaron a la menor sangrando e inconsciente en la bañera sin la atención de ningún médico. Según los condenados, aunque el bebé llegó a nacer, lo hizo ya muerto y por ello se deshicieron del cuerpo sin avisar a la Policía.

Sharon Jones, de 47 años, es la tía de la víctima y fue sentenciada a 12 años, mientras que su hija Cecilia McDonald, de 28 años, recibió una pena de siete años, y su hijo de 29 años, Cedric Jones Jr., fue sentenciado a cinco años de prisión.

La pena que aún no se conoce es la de Robert Cayald, el hermano que violó de la menor, ya que no compareció en el juicio.