Un pedófilo que se grabó a sí mismo abusando de una niña de 13 años en Reino Unido ha sido condenado a 16 años de prisión gracias a los vídeos que se hizo, según publica The Mirror.

Lee Stuart Curley violó al menos 120 veces de la menor entre mayo de 2015 y marzo de 2016, y fue detenido cuando pensaba atacar a una segunda víctima.

El agresor sexual negó inicialmente todas las acusaciones, pero finalmente reconocio los hechos al darse a conocer sus imágenes pornográficas y vídeos de las violaciones.

Curley tenía alrededor de 1.000 archivos pornógraficos, entre vídeos e imágenes, de menores de edad. Carla Goymer-Ellice, jefa de Policía que ha llevado el caso, afirma no haberse enfrentado nunca a un caso tan terrible como este en sus 14 años de carrera policial.