La Audiencia de Valladolid ha condenado a 28 años de prisión a Davinia, madre de la niña Sara fue asesinada en 2017 tras ser víctima de violaciones y maltrato continuado por parte de la pareja de ésta.

Por su parte, el agresor y autor de los hechos, Roberto, ha sido condenado a prisión permanente revisable y a otras penas que suman 22 años de prisión

Para el juez la pena establecida es justa ya que considera que madre no protegió de la forma que debía a su hija y optó por ocultar el asesinato.

No obstante, Davinia no queda privada de la patria potestad de su hija mayor, de 12 años, ni se le establece la prohibición de comunicarse con ella al aplicar jurisprudencia del Tribunal Supremo que exigiría que para ello dicha menor hubiera sufrido los hechos o presenciado los mismos.

La resolución judicial, firmada por el presidente de la Audiencia Provincial de Valladolid, Feliciano Trebolle, se ha basado en el veredicto del jurado popular que deliberó sobre el caso, integrado por cuatro mujeres y cinco hombres, que hicieron pública su decisión el pasado 25 de mayo.

Según los forenses que practicaron la autopsia a Sara, ésta murió tras ser golpeada de forma contundente en la cabeza con un objeto romo, sin puntas, sufrió un intento de penetración vaginal, y padeció múltiples lesiones en el cuerpo causadas poco antes de su fallecimiento y desde hacía tiempo.

Pese a la gravedad de su estado antes de morir, un policía que acudió a la casa de la pequeña ese 3 de agosto testificó ante el juez que su madre y el padrastro estaban "demasiado tranquilos". Él esperaba que al llegar tuviese que hacer frente a una situación de "histeria" pero para su sorpresa la progenitora mostró "una tranquilidad que no era normal para lo que estaba pasando".

No obstante, antes del fatal desenlace un pediatra de la menor ya había alertado un mes antes a los Servicios Sociales de que Sara pudiera estar sufriendo malos tratos. Aunque la madre de Sara atribuyó las lesiones de la niña a que era muy inquieta, se caía mucho y se golpeaba, a él no le parecieron hematomas provocados por caídas.