La borrasca Fabien, tal y como ha indicado la meteoróloga Joanna Ivars, va a golpear de lleno a la Península y sus primeros efectos ya se están notando en el oeste de Castilla y León, Asturias y Galicia, que se lleva la peor parte.

A pesar de que las previsiones hablaban de rachas de viento de hasta 140 kilómetros por hora, se han superado con creces. En Viveiro, Lugo, han sido de hasta 183 kilómetros por hora.

Mientras, el oleaje golpea fuertemente toda la costa gallega, en aviso rojo, con olas superiores a los diez metros, olas que se consideran 'montañosas' debido a sus grandes dimensiones.

En toda Galicia ha habido 555 incidencias, fundamentalmente por caída de árboles problemas circulatorios o desprendimientos.

Además, hay 78.000 hogares con problemas de suministro eléctrico: bien porque no tienen luz o porque el suministro es intermitente.

Baja también la cota de nieve, que podría caer en puntos de Lleida.

Tras el paso de Elsa por la Península, que ha dejado seis víctimas mortales en España, la profunda borrasca atlántica Fabien, mantiene a 50 provincias en alerta.