El ciberataque a uno de los mayores oleoductos estadounidenses ha hecho saltar todas las alarmas de las grandes empresas, sobre todo los aeropuertos, que temen ser víctimas de estas ofensivas cibernéticas.

Tal y como ha explicado la CEO de Pentaquark Consulting, Stella Luna de María, se trata de lugares "donde hay concentración de mucha gente, todo el mundo lleva mucho dinero encima y estamos con la guardia baja porque nos vamos de vacaciones".

Las redes WIFI gratuitas, la facturación online, los pasaportes electrónicos y los controles fronterizos no tripulados mejoran la eficiencia de los aeropuertos comerciales, pero también suponen una puerta de acceso a los cibercriminales.

Otro de lo ataques habituales se produce a través de la banca online. "Los peores casos de phising van a ser aquellos que intenten obtener tus credenciales a servicios públicos, como por ejemplo el banco", ha explicado Eusebio Nieva, director técnico de 'Check Point' para España y Portugal. Por eso, avisa Luna de María, "si tienes la necesidad imperiosa de entrar en las claves de tu banco, hazlo a través de la web porque es más seguro".

También son muy habituales los que sufren las empresas: "Un tipo de estafa que se da con las nuevas tecnologías y que suplanta la imagen de una gran empresa", ha explicado el portavoz de la Policía Nacional Víctor Fernández.

En general, los ciberataques han crecido en España un 125% a raíz de la pandemia, al igual que las denuncias por este tipo de delito, que han pasado de 218.000 en 2019 a 240.000 en 2020. Se convierte así en el segundo delito más habitual en España, adelantando a robos con fuerza en domicilios.