El hotel no quiere hacer ninguna declaración, simplemente dice que habrá una rueda de prensa aunque no confirman la hora. Están bastantes preocupados de cara al turismo que puedan perder en Semana Santa.

Un cliente alojado en el hotel confirma que hay numerosos daños y que incluso a él le tuvieron que atrasar la hora de entrada porque tuvieron que limpiar rápido la habitación. Se trata de al menos 1.000 estudiantes portugueses que viajaron a Torremolinos a celebrar el viaje de fin de curso.

La dirección les llamó repetidas veces la atención debido a la música alta, al alboroto y por la consumir bebidas alcohólicas. Justo antes de marcharse decidieron realizar todo este tipo de destrozos, azulejos rotos, extintores vacíos, colchones que aparecieron fuera de las habitaciones e incluso televisores en las bañeras. De momento la Policía continúa la investigación y no hay detenidos.