Centenares de mujeres religiosas, laicas o seglares se han concentrado frente a la catedral de La Almudena de Madrid y la Catedral de Sevilla para pedir "la igualdad efectiva" dentro de la iglesia.

En un acto bajo el lema 'Revuelta de mujeres en la iglesia: hasta que la igualdad se haga costumbre', y en el que no han faltado canciones y danzas, estas mujeres han instado a que ellas puedan tener "voz y voto" e incluso, por ejemplo, poder decir misa.

A esta protesta también han asistido monjas y hombres de varias parroquias y diversos grupos. "La gente entiende que tenemos que dar pasos" y "hay hombres que también apoyan este movimiento", ha explicado Teresa De Troya, integrante de este movimiento.

En un tono "amable y amistoso", se han coreado lemas como 'De norte a sur, de este a oeste, igualdad en la iglesia cueste lo que cueste' o 'Jesús de Nazaret nos quiso junto a él'.

De Troya ha destacado que el objetivo es que la iglesia "sea incluyente" y aunque la principal reivindicación ha sido el papel de la mujer, ella insiste en que también incluye "a emigrantes o personas con diversas orientaciones sexuales, entre otros". "Queremos hacer iglesia y cambiarla, pero no enfrentarnos a ella", ha añadido.

Han leído un manifiesto en el que denuncian "las múltiples formas de injusticia e invisibilización" que sufren en la iglesia."Queremos hacer visible nuestro trabajo incansable y gratuito. Las mujeres somos mayoría aplastante en el voluntariado, en las celebraciones religiosas, en catequesis, en pastoral, en la acción social con las personas más empobrecidas, en los movimientos eclesiales, en la enseñanza, en la vida religiosa", han recordado.

Por ello, han criticado "la cobardía para abordar cambios en la organización de la iglesia, frente a los signos de los tiempos que claman por sí mismos, y la cerrazón ante la necesidad de un cambio imprescindible: el acceso al diaconado y al presbiterado femenino para atender a las comunidades cristianas".

Asimismo se han referido a la "dolorosa violencia ejercida sobre mujeres, religiosas y laicas, además de otras formas de violencia lamentables".