Hamburguesas, steak tartar o carpaccio. Mucho cuidado con estos platos hechos con carne picada. Si los consumimos poco hechos existe un riesgo de sufrir una intoxicación alimentaria.
Jugosidad, ternura, sabor... Para muchos amantes de la carne, ese bocado poco hecho es irresistible. Pero mucho cuidado porque comer carne cruda, en algunos platos, implica un riesgo para la salud. Concretamente cuando son elaboraciones a base de carne picada de vacuno picada como son las hamburguesas, el steak tartar o el carpaccio. Así lo advierte la Agencia Española de Seguridad Alimentaria en una publicación difundida en su cuenta de Twitter.
El motivo, informan, si la pieza de carne está contaminada o se contamina durante su preparación cuando se corta o pica las bacterias se reparten por todo el producto. "En una pieza entera de carne, las bacterias suelen estar en la superficie y al cocinarla se eliminan fácilmente. En una pieza de carne como es una hamburguesa, hecha de carne picada, las bacterias de la superficie ya pueden estar en el interior, con lo cual, ya es más difícil eliminarlas durante el cocinado", explica Miguel Ángel Lurueña, doctorado en ciencias de la alimentación y tecnología.
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria para evitar una intoxicación alimentaria recomienda consumir siempre estos alimentos bien hechos. Para evitar cualquier contaminación, recuerdan, es fundamental que tanto en casa como en restaurantes se mantengan las medidas de precaución: mantener la cadena del frío, manos y utensilios limpios y evitar la contaminación cruzada. "Tabla y cuchillos que usemos tienen que ser específico para ello", nos cuenta Iván Álvarez, chef del restaurante Etxanobe.
Si optan por preparar la hamburguesa casera, la agencia les da un consejo: cocinen la pieza de la carne antes de picarla.
Las redes banalizan a Franco
Franco 'vive' en las redes y triunfa entre los jóvenes: la ultraderecha blanquea con bulos una dictadura sangrienta
¿Por qué es importante? Un discurso franquista que vuela en internet y que cala en los más jóvenes que entonan ya el cara al sol como si de un hit se tratase. Para llegar a la juventud, la ultraderecha crea incluso vídeos falsos con sus ídolos.