Amplio dispositivo policial para localizar a un bebé de cinco meses y a su hermano de casi cuatro años en varios municipios de la comarca de l'Horta. Los menores desaparecieron en extrañas circunstancias este miércoles 14 de marzo.

A primera hora de la mañana un vecino avisaba en la localidad valenciana de Rocafort, que había un hombre de pelo rubio aparentemente persiguiendo a una mujer, ambos semidesnudos.

La Guardia Civil se desplazó hasta el punto donde ocurrieron los hechos y no encontró a nadie. Los vecinos les remitieron a una barraca donde, presuntamente, vivía una familia okupa.

Allí encontraron a un hombre con rasguños y signos de sangre en la cara. Posteriormente, las autoridades le preguntaron por su familia, y tras incurrir en varias contradicciones y asegurar que había tenido una discusión con su mujer, llega a espetar: "No se preocupen, que están todos muertos".

En ese momento la Guardia Civil comienza a buscar a los familiares del hombre, que incluso llega a decir que su mujer le ha dicho que iba a irse al fondo de una piscina para reencarnarse en sus hijos.

Al rededor de las 13:00 horas, un perro adiestrado de Servicio Cinológico de la Guardia Civil de Valencia localizaba a la mujer con vida cerca del casco urbano de Godella, aunque aún no ha dado declaraciones sobre el paradero de sus hijos.

Se habían desplegado numerosos agentes para dar con el paradero de los menores, que finalmente han sido encontrados sin vida enterrados en las cercanías de la casa en la que vivían junto a sus padres. Ambos han sido sometidos a un largo interrogatorio sin que se hayan pronunciado.

El padre de los niños desaparecidos en Godella asegura a la Guardia Civil que "están todos muertos"