Bomberos forestales de toda España se han concentrado esta mañana ante el Congreso para reclamar una mejora de sus condiciones. Jesús es uno de los bomberos que se quedó atrapado entre las llamas en un incendio en Almorós, en Toledo. "Nos quedamos atrapadas cinco personas. El fuego nos tapó la vía de escape", explica a los micrófonos de laSexta.
Se juegan la vida para apagar los incendios que arrasan la Península por unas condiciones pésimas. "Nos estamos jugando la vida por un contrato de cuatro meses al año y cobrar poco más de 1.200 euros", afirma.
Muchos de ellos se han enfrentado a situaciones muy peligrosas y reclaman "derechos laborales" para todo el colectivo. Reivindican que todos cuenten con los mismos medios, más formación, que les reconozcan la categoría de bombero forestal, la peligrosidad y que tengan en cuenta la edad de estos profesionales.
"Yo tengo 57 años y no sé hasta cuándo me van a tener en un incendio forestal o cargando con una motosierra", denuncia María José.
Por ejemplo, la nómina de un brigadista que trabaja para una empresa privada y el sueldo supera por poco los 1.000 euros. Apenas le pagan 33 euros más como plus de peligrosidad y su categoría profesional es de peón.
Los representantes sindicales se han acercado hasta a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a quien le han querido dejar claro que esta es una sangrante situación en toda España.