La pequeña Hannah se ha convertido en el bebé más pequeño de la historia de Reino Unido. Y es que esta bebé es más pequeña que la palma de una mano y ha nacido con escasos 325 gramos.

La niña nació por cesárea de emergencia tras graves complicaciones a las 25 semanas de gestación. y después de que los médicos advirtieran a los padres de que no había casi ninguna posibilidad de que saliera con vida.

Sin embargo, contra todo pronóstico, la niña nació respirando por sí misma y sin necesitar siquiera reanimación. "Estamos muy orgullosos de ella. Salió luchando por su vida y demostró que todos estaban equivocados", explicaba su madre al medio británico Daily Record.

Desde su nacimiento, Hannah evoluciona favorablemente desde su nacimiento el pasado 30 de diciembre y tanto los escáneres cerebrales como los cardíacos no han mostrado anomalías.