El bebé que sufrió la amputación de su pierna "por error" en Castellón también habría recibido un fármaco caducado, según denuncian sus padres en una carta incluida en el escrito que el Defensor del Paciente ha enviado a la Fiscalía para que investigue el caso.

Los padres del pequeño Gerard, gestado mediante fecundación in vitro y que nació prematuro, aseguran que en los tres meses que pasó su hijo en el Hospital General de Castellón vieron a enfermeros manipularlo sin desinfectarse las manos, algo obligatorio en la UCI de neonatos, y que se dieron cuenta de que le daban "Ventolin caducado".

Además, cuentan que en el hospital estuvieron dos días pinchando al niño en las femorales buscando una vía central y que cuando les dejaron verlo, presentaba hematomas en la pierna. Aseguran que cuando preguntaron qué había pasado, la pediatra jefe les respondió literalmente "nos hemos equivocado", en referencia al pinchazo que le dieron en la pierna derecha.

La pierna del bebé adquirió un tono morado y comenzó a empeorar, hasta que los médicos decidieron intervenirlo. "Primero nos dijeron que quizás solo le amputarían la punta de los dedos, después ya nos confirmaron que la amputación sería de diez centímetros por debajo de la rodilla", cuentan.

"Se equivocaron, buscando una arteria perforaron una vena y esta se cerró, cortando el riego sanguíneo a la pierna derecha", denuncian los padres en su carta. Como consecuencia, de acuerdo con el Defensor del Paciente, el pequeño presenta más de un 80% de discapacidad.