El Gobierno de Italia impedirá a los 177 inmigrantes que están a bordo de un barco de la Guardia Costera italiana, que atracará en la ciudad siciliana de Catania, bajen a tierra hasta que la Unión Europea decida su reubicación.

Así lo confirmaron fuentes oficiales que indicaron que "el Ministerio del Interior italiano no ha dado ni dará ninguna autorización (para desembarcar) hasta que no tenga la certeza de que los 177 inmigrantes irán a otros países".

La fuente señaló que el Gobierno italiano espera "una respuesta por parte de la UE" para recolocar a estas personas, como se ha hecho en anteriores ocasiones, como con el barco Aquarius y los 141 rescatados, que desembarcaron en Malta y serán repartidos entre seis países europeos, incluido Italia.