El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha informado este sábado del resultado de la autopsia realizada al cadáver de Olivia, que revela que la niña de seis años falleció por un edema agudo de pulmón, aunque todavía falta por conocer los resultados de los análisis toxicológicos, biológicos e histopatológicos.

El cuerpo sin vida de la menor, a la que se buscaba desde el pasado 27 de abril, día en el que desapareció junto a su padre Tomás Gimeno y su hermana Anna, fue hallado el pasado jueves a 1.000 metros de profundidad. En ese momento, el Instituto Anatómico Forense de Tenerife procedió al levantamiento del cadáver para realizarle la autopsia, que concluyó a las 15:00 horas del viernes, ha precisado el TSJC, que también puntualiza que otras conclusiones respecto a las pruebas practicadas quedan a la espera de los resultados del resto de análisis.

Según ha indicado Manu Marlasca, jefe de Investigación de laSexta, que la causa de la muerte que revela la autopsia "es compatible tanto con un ahogamiento, es decir, que fuese lanzada viva al mar, o con una asfixia mecánica que presuntamente le habría provocado su padre con una almohada, manta o algo que ocluyese sus orificios respiratorios". "Serán los histopatólogos, los patólogos y los toxicólogos los que determinen finalmente la causa de la muerte de la niña, aunque es pronto para eso, ya que constará en el informe definitivo de autopsia, que tardará días en conocerse", ha afirmado Marlasca.

La prueba de las huella dactilares realizada en el Instituto Anatómico Forense confirmó este viernes que el cuerpo encontrado era el de Olivia, ya que coincidían con la base de datos del Documento Nacional de Identidad. Así, su identificación se hizo oficial, aunque el informe de la autopsia sigue siendo preliminar, a la espera del trabajo de patólogos y otros especialistas que puedan determinar la causa de la muerte.

Precisamente, este sábado el buque Ángeles Alvariño, que encontró a Olivia y que busca a Anna y a Tomás Gimeno, ha regresado a puerto a las 7:00 horas de este sábado y pasará todo el fin de semana atracado por "cuestiones técnicas". La embarcación ha estado rastreando palmo a palmo el fondo marino en aguas cercanas a la isla de Tenerife, a más de 1.000 metros de profundidad, tras variar ligeramente su posición en la tarde de este viernes. En concreto, el Ángeles Alvariño se centró en la zona acotada por los especialistas, cerca del lugar donde este jueves hallaba el cuerpo sin vida de Olivia, de seis años, la mayor de las dos niñas secuestradas por su padre a finales del pasado mes de abril.

En lo referente a Anna, el jefe de investigación de laSexta ha señalado que "la Guardia Civil tiene menos esperanzas de encontrar su cuerpo que el de Tomás Gimeno, ya que una inspección detenida de la bolsa que se encontró vacía junto al cuerpo de Olivia, ha determinado que estaba rajada, posiblemente por el ancla con el que fueron lanzadas las bolsas para que cayeran hasta el fondo del mar". En este sentido, Marlasca ha indicado que los investigadores barajan la tesis de que "Anna ni siquiera bajase a la profundidad de 1.000 metros donde fue encontrada su hermana".