Sucedió el pasado 15 de febrero en Alcalá la Real, Jaén. Un joven de 22 años asesinó a una menor de 14 años en la Fortaleza de La Mota y después se lo comunicó a la Guardia Civil.

laSexta ha tenido acceso a los audios en los que el agresor llamaba a Emergencias 112 de Andalucía para comunicar el crimen. En la llamada, el joven mantiene un tono relajado y comunica lo sucedido con una tranquilidad llamativa.

"He matado a una chica y quería que viniesen", dice el asesino a la trabajadora que le atendió telefónicamente, que le preguntó dónde se encontraba. Él le dijo que estaba en el "Castillo de La Mota": "Que vengan a la entrada y los llevaré hasta el cuerpo".

El agresor asegura en la llamada que la menor "era conocida", pero niega tener con ella ninguna relación sentimental o de amistad. "Llevo una camiseta roja, les esperaré en la entrada", dijo.

laSexta también ha tenido acceso a otros audios que el asesino envió a un amigo tras cometer el crimen: "No sé tío, se me ha ido la puta cabeza".

"Sus amigas sabían que se había venido conmigo y le he dicho a Carlos que se suba, a ver si me puedo echar un último cigarro por lo menos. Los padres de la chica llamarán a la Policía dentro de poco, porque hace rato que tendría que haber estado en casa, o sea 0% jajaja", dice en ese mensaje de audio.

El joven, además, no muestra ningún signo de sentirse arrepentido y llega a señalar que lo que más le "duele" es "Japón": "Es que no paro de pensar Japón con la coña, es lo que más me duele, simplemente todos los esfuerzos truncados, adiós Japón, es que se me va la puta cabeza, yo no nací para existir en este mundo ni en ninguno".

"No le busques el sentido, en fin, yo lo dije siempre, que no me gustaba existir, que no estoy hecho para existir ni en sociedad ni en ningún sitio. Pero si yo te había dicho desde siempre que soy un psicópata ¿o es que nunca me habías creído?", reconoce en esos audios.

La familia de la víctima, Jaula, aseguró entonces que era buena estudiante, responsable, que apenas salía con amigas, y sobre todo puntual. Por eso, su madre se agobió su tardanza la noche del crimen: "Cuando llegaron las nueve en punto, yo salí corriendo. Sentía algo en el cuerpo, me eché a llorar".

El asesino tiene antecedentes por agresión sexual. Con 15 años, en 2014, atacó a una joven cinco años mayor que él en plena calle. Además, durante su estancia en prisión ha agredido a dos funcionarios del Centro Penitenciario de Jaén.