Las madres gestantes se publicitan a través de catálogos, donde dan detalles de su vida personal. Aportan datos sobre su lugar de residencia o sus aficiones. "En mi tiempo libre me encanta pasar tiempo con la familia, montar en moto o todo lo que tenga que ver con los coches", señala una de ellas. También aportan las razones que les llevan a convertirse en un vientre de alquiler.

"Me hice madre subrogada porque me encanta estar embarazada", confiesa otra. Algunas llegan a reconocer la motivación económica. "Al dar este increíble regalo a alguien, yo, a cambio, podría darle a mi familia una casa propia y cambiar nuestras vidas", escribe otra madre gestante.

En estas plataformas se puede, incluso, ver vídeos de la conversación entre la madre gestante y la madre por gestación subrogada. "Cuando vimos a tus hijos y vimos lo que hacías en tu tiempo libre, vimos que eras perfecta", le dice la segunda de ellas en el vídeo.

Todas las candidatas son mujeres jóvenes que ya han sido madres previamente. En Estados Unidos cobran entre 30.000 y 40.00 euros. Las que ya lo han hecho alguna vez pueden recibir un plus. Pero la cifra es inferior en otros países. En Ucrania, por ejemplo, la llamada 'madre sustituta' recibe unos 15.000 euros.

Rafa y Pablo son padres de una niña por gestación subrogada. "Durante todo el proceso nos hemos estado conociendo cada vez más profundamente", cuenta uno de ellos a laSexta. Adía de hoy, siguen manteniendo una relación fluida con la madre gestante. Se han ido un par de veces de vacaciones a Estados Unidos y ellos han estado este pasado veraneo en España durante 10 días.

"Nosotros lo hacemos por ayudar a la gente a tener su propia familia", asegura Michelle, gestante subrogada en Chicago. Son ellas, las familias, las que deciden el tipo de vínculo que quieren mantener.