Aquí vemos a Carlos García Roldán y a su socio Michele Pilato, de fiesta y luciendo botellas de Moet Chandon. Una vida de lujo que, supuestamente, consiguieron mediante estafas inmobiliarias a más de 250 personas.

Este verano cayó Pilato, durante los registros de sus locales en Palma. García Roldán se había fugado a la ciudad de Buga, situada a 400 kilómetros de Bogotá, en Colombia. Pero la Guardia Civil ha dado con él.

A sus víctimas les hacían pagar el 10% de casas que adquirían sobre plano. Por ejemplo, la propiedad valía 350.000 euros, les estafaban 35.000. Una vez tenían el dinero, desparecían. Los estafados celebran la noticia pero también quieren saber qué pasa con su dinero.

"La Guardia Civil sigue trabajando en el caso y sobretodo a localizar donde está el dinero", cuenta Tomeu Vidal, abogado de 100 denunciantes. García Roldán está en una prisión de Colombia. Ahora comenzarán las gestiones, según la guardia civil, para extraditarlo a España.