La justicia ha acordado el sobreseimiento provisional del caso de las niñas de Tenerife, Anna y Olivia, hasta que sea hallado el presunto asesino, Tomás Gimeno.

Así se ha dictado en un acto del juzgado de Violencia número 2 de Tenerife firmado por la magistrada María de los Ángeles Zabala.

En el escrito judicial se indica que de las investigaciones de la Guardia Civil se desprende que Gimeno "es con toda seguridad" el autor material de la muerte violenta de sus dos hijas, Anna, que tenía 1 año, y Olivia, 6, y se descarta la participación de terceras personas.

En este sentido, el instituto armado considera que "no queda ningún aspecto de lo sucedido que no haya sido investigado" y que Gimeno se halla en paradero desconocido, "o bien desapareció en el mar", como concluye el atestado policial. Por ello, se decreta el archivo de la causa "hasta tanto sea hallado el imputado".

El pasado 10 de junio, tras 45 días de búsqueda, fue localizado el cuerpo sin vida de Olivia, la mayor de las hermanas, en el fondo del mar. Según la autopsia, la menor fue asfixiada antes de ser arrojada al agua. Sin embargo, el Ángeles Alvariño, el buque que estuvo al frente de la búsqueda, no pudo dar con Anna ni con Tomás Gimeno.

La embarcación de Gimeno fue localizada frente al Puertito de Güímar y allí fueron encontradas dos botellas de submarinismo. La Guardia Civil plantea que Gimeno tuvo que hundirse en una zona próxima "pero su cuerpo debió de haberse visto afectado por las corrientes y las mareas, lo que podría derivarlo a cualquier otra posición".

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Como se puede ver en el vídeo de portada, los bomberos intentaron capturarlo a través de la ventana. Pero el animal estaba muy nervioso. Se resistía y no paraba de ladrar.