Una familia trata de refugiarse del fuego, cuando llegan los agentes. "No, yo no hablo español", dice la madre, mientras se les ve angustiados intentando salir de la casa en llamas.

Los segundos corren en contra, porque las llamas, de hasta diez metros, están muy cerca. Intentan alejar el humo como pueden mientras los agentes tratan de acceder a ellos prácticamente a ciegas.

La madre trata de salir por el tejado, desesperada, su hija lo graba, pero es imposible, solo se escucha el sonido de uno de sus hijos que llora desconsolado. Gracias a este llanto, los agentes que van a ciegas por la casa consiguen acercarse.

Finalmente, consiguen rescatarlos y llevarlos al exterior, tapándoles las vías respiratorias con trapos húmedos. Arriesgando sus vidas. Este fuego se originó en el garaje. En las placas de acumulación de energía de estos paneles solares. Además, se propagó rápidamente. Calcinando la parte baja del chalet, llegando a afectar también a las parcelas cercanas.