Una amiga de la infancia de María Dolores, la madre del menor de 11 años asesinado por su padre el domingo en Sueca, ha asegurado que el agresor, que anteriormente había intentando matarla a ella, la tenía "completamente anulada" y "no le dejaba salir de casa". Así lo ha asegurado a los periodistas María del Carmen Cruañes, quien se ha acercado hasta los juzgados de Sueca donde esta mañana ha prestado declaración el presunto homicida y, posteriormente, el titular del juzgado ha acordado su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
El detenido ha llegado sobre las 12 horas al Juzgado de Instrucción número 4 de Sueca, en funciones de guardia, y tanto a la entrada como a la salida de las dependencias judiciales ha sido increpado con gritos de "asesino" y "cobarde" y ha habido incluso un forcejeo entre familiares y amigos y agentes de la Guardia Civil, al intentar los primeros acercarse al coche donde era trasladado a prisión. Finalmente, el juzgado ha acordado la prisión provisional, comunicada y sin fianza para José Antonio A., detenido el pasado domingo como presunto asesino de su hijo en este municipio. El hombre queda investigado en una causa abierta por un delito de asesinato en relación al menor, y por los delitos de quebrantamiento continuado de condena, maltrato y maltrato psicológico en relación a su expareja, sin perjuicio de ulterior calificación.
Los vecinos que esperaban en las puertas del juzgado le han increpado con insultos y gritos de "asesino". Allí se encontraba Carmen Cruañes, que ha explicado ante los medios que la expareja de María Dolores, madre del pequeño Jordi, la tenía "completamente anulada". "No quería que saliera de casa porque decía que como tenía un hijo ya no tenía que salir de casa, la apartaba" de ellas cuando era la "única que trabaja" y él se encargaba del cuidado del niño.
"No pensábamos que podía hacerle algo al niño porque lo quería, pensábamos que se lo haría solamente a ella", ha dicho para añadir que al ser el que ha criado al niño "no cuadra lo que ha hecho" y asegurar que se sienten "engañados" porque pensaban que quería a su hijo, pero "con ese ensañamiento que ha tenido, ha demostrado que no lo quería nada".
Según ha relatado, el detenido "ha sido siempre una persona que no ha estado bien" y cuando empezaron los malos tratos "ella se separó", y cuando se dio cuenta de que ella no iba a volver "pensó en ir a por su hijo, que es lo que más le iba a doler".
Asegura que el detenido ya intentó "matarla una vez pero le salió mal, le llegaron a ver con un cuchillo" y por eso, ha dicho, piden que no salga de la cárcel, porque si lo hace "irá a por ella". También ha señalado que la familia del detenido "no lo quieren, no quieren saber nada él" y ha concluido: "No queremos que salga de la cárcel porque es un cobarde y por eso hemos venido hasta el juzgado".
El hombre y su mujer, la madre del niño, se habían separado el verano pasado. El maltratador le dijo "que le iba a dar a ella donde más le doliera". Fue la madre del menor, de 44 años, la que alertó a los servicios de Emergencia tras acudir a recoger al menor en casa del marido y no obtener respuesta a sus llamadas. El presunto parricida estaba denunciado por malos tratos con anterioridad, por lo que pesaba sobre él una orden de alejamiento dictada el 12 de agosto de 2021 por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Sueca, con competencias en materia de violencia sobre la mujer.