El aeropuerto de Madrid Barajas, el de mayor tráfico en España, no está sufriendo alteraciones pese a la huelga de los trabajadores de los movimientos de tierra convocada para este 31 de diciembre.

Los servicios mínimos alcanzan el 91% en una jornada en la que es habitual el trasiego en los aeropuertos de pasajeros que regresan a casa y se reúnen con sus familiares y amigos para celebrar el fin de año.

Por ello, en Barajas no se han registrado retrasos ni cancelaciones, y sí se han vivido emotivos reencuentros.

La jornada de huelga ha sido convocada por UGT para los trabajadores de las torres de control de plataforma del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas desde el 31 de diciembre hasta el 7 de enero, en plenas Navidades y afectando también a la operación retorno.

A las movilizaciones de los trabajadores del servicio handling de Iberia coincidiendo con la festividad de Reyes y la operación retorno (entre el 5 y el 8 de enero), que siguen adelante y que ha llevado a cancelar 444 vuelos, se suma ahora otra convocatoria por parte de UGT de un paro en el aeropuerto madrileño.

En concreto, el sindicato ha convocado movilizaciones en protesta, según aseguran, por la imposibilidad de arreglar "una situación laboral insostenible que afecta directamente la seguridad de las operaciones aeroportuarias".

Las "extenuantes jornadas" debido al pluriempleo y a una alta rotación de la plantilla (donde el 60% del personal tiene menos de seis años de experiencia) comprometen la concentración necesaria en un servicio crítico para la seguridad aeroportuaria, según UGT.

La convocatoria de paros afectará al control en los movimientos en tierra de las aeronaves en las maniobras previas al despegue así como a las que se realizan una vez que el avión aterriza hasta las correspondientes terminales.

UGT considera "necesario y urgente" resolver este conflicto laboral para evitar los "graves perjuicios" que se pueden ocasionar en el tráfico aéreo de este importante aeropuerto español. El sindicato apela a la "responsabilidad" de la empresa que gestiona estos servicios para evitar los "enormes retrasos" que se pueden producir en estas fechas y que afectarían a los vuelos directos y escalas nacionales e internacionales.