A partir de la experimentación con  animales se elaboraban todo tipo champús, maquillajes, pasta de dientes, jabones o cremas corporales. Hasta este lunes. Su destino final siempre es la muerte. Se les sacrifica para analizar sus órganos. Los animales más utilizados son conejos y ratas. P

ero a partir de ahora ya está prohibido testar cualquier cosmético con animales en la unión europea.   No se prohibirá la venta de aquellos cosméticos para los que se hayan usado en el pasado pruebas con animales para acreditar la seguridad para el consumidor.

Los Estados miembros acordaron hace diez años prohibir la experimentación con animales para la fabricación de cosméticos como cremas, champús y pasta de dientes, pero contempló una exención hasta este 11 de marzo para las empresas que realizan las pruebas "más complejas", que podían aún comercializar sus productos si los test se habían realizado fuera de la UE.

La prórroga ha servido para testar efectos "más complejos" para la salud humana como la toxicidad por administración repetida, incluida la sensibilización cutánea y la carcinogenicidad, así como la toxicidad para la función reproductora y toxicocinética.

El comisario de Salud y Consumo, Tonio Borg, ha explicado que la entrada en vigor del veto comercial "total" es "una señal importante del valor que Europa concede al bienestar animal" y ha asegurado que el Ejecutivo comunitario seguirá apoyando el desarrollo de métodos alternativos a la experimentación con animales.

Bruselas también dirigirá sus esfuerzos a intentar que otros países que no pertenecen a la Unión Europea se unan a esta posición para frenar las pruebas de laboratorio con animales para testar productos cosméticos.

"Esta es una gran oportunidad para que Europa sea ejemplo de una innovación responsable en el sector de la cosmética, sin comprometer en ningún modo la seguridad del consumidor", ha subrayado el comisario.

La evaluación de impacto que ha realizado la Comisión Europea sobre la aplicación de esta prohibición completa indica que hay razones "imperiosas" para su entrada en vigor, según indica la institución europea en un comunicado, en el que señala la "convicción" de gran parte de la opinión pública respecto a que "la producción de cosméticos no justifica los ensayos con animales".

Con todo, Bruselas concede que la restricción que se impone ahora a los cosméticos no se puede extender a otros productos de laboratorio para los que "aún no es posible la sustitución total de los ensayos con animales" por métodos alternativos, por lo que insiste en la necesidad de apoyar la investigación en este sentido.