Detrás de los incendios, de las enormes llamas arrasando los bosques de España, muchas veces está la mano del hombre. Puede ser de forma involuntaria o intencionada."El 96% de los siniestros están causados por actividades humanas, más de la mitad, el 54% de los incendios que se producen están causados de forma intencionada", detalla Raúl de la Calle, secretario general del Colegio de Ingenieros Técnicos Forestales.
Es el caso de este incendio del Valle del Jerte, en Extremadura. Los agentes forestales también sospechan que el de Pont de Vilomara, en el que las llamas afectaron a decenas de viviendas, también fue intencionado.
Detrás de fuegos peligrosos como estos, los expertos explican que hay numerosas motivaciones. "Incendiarios, aquellos que pegan el fuego con algún motivo. Por ejemplo, con las prácticas agrícolas y ganaderas, venganzas, con temas relacionados con la caza, con alguna actividad económica", asegura De la Calle.
Los últimos datos revelan que en 2020 entre los incendios con un origen intencionado, casi el 20 por ciento de los fuegos fueron provocados por pirómanos. La Guardia Civil investigó más de 3.300 incendios y se detuvieron a 437 personas. El Código Penal recoge penas de entre 10 y 20 años de cárcel y multa de 12 a 24 meses a quienes provoquen un incendio forestal que suponga un peligro para la vida o la integridad física.