El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha visitado una de las zonas afectadas por la crecida del Ebro en Zaragoza. Allí el presidente del PP de Zaragoza, Ramón Celma, se ha acercado al jefe del Ejecutivo para hacerle un reproche. De un modo irónico, Celma ha entregado unas botas de agua a Sánchez y le ha dicho que son "para que pise el barro".

"Presidente Sánchez, ¿qué tal? Soy Ramón Celma, presidente del PP de Zaragoza. Le traigo estas botas porque está muy bien venir con una comitiva pero hay que mancharse las botas de barro. Lo que hay que hacer es invertir y limpiar el río", ha espetado el 'popular' al presidente del Gobierno. Sánchez ha reaccionado preguntando si las botas eran para él y dando las gracias.

El propio Celma ha compartido el vídeo del momento en sus perfil de Twitter, bajo el texto de "Que Pedro Sánchez pise barro".

De todo esto hay un hecho que ha llamado la atención de los usuarios de la red social, y es que Celma, al tiempo que entrega unas botas de agua, visita con mocasines en mitad del fango que ha quedado por el desbordamiento del río y las fuertes lluvias en la zona. Es por eso que algunos piensan que ha convertido su acción en un acto de hipocresía.