"Tristemente la vacuna NO ha implantado al genio de mi padre en mi cerebro - si el mRNA tuviera ese poder...!". Es el irónico mensaje que Jennifer Katharine Gates, hija mayor de Bill Gates, ha lanzado a través de las redes sociales tras ponerse la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus.
La joven, que estudia Medicina, hacía esta broma a raíz de las múltiples teorías de la conspiración que han arreciado desde el inicio de la pandemia y que acusan al fundador de Microsoft de querer implantar un supuesto 'chip' en las personas a través de la vacunación.
Jennifer, que ha recordado que hace ya un año de la aparición del nuevo coronavirus, ha celebrado en Instagram que ahora tengamos "más soluciones, incluidas inmunizaciones, para ayudar a proteger a los individuos y las comunidades". "Me siento más que privilegiada por recibir mi primera dosis de mRNA [ARN mensajero] para enseñar a mis células a crear una respuesta inmune protectora contra este virus", ha escrito.
"Como estudiante de Medicina y aspirante a médico, estoy agradecida de que me dará protección y seguridad para mi futuro desempeño", añade Gates en su post, en el que asimismo urge a todos a informarse al respecto y a considerar ponerse ellos mismos la vacuna, así como sus familias, cuando tengan la oportunidad. "Cuanta más gente se inmunice, más seguras serán nuestras comunidades para todos", afirma.
La joven, de 24 años, ha insistido en su gratitud hacia los médicos, científicos, expertos en salud pública y farmacéuticos, que han hecho posible "este avance en la medicina moderna". "Nuestros profesionales sanitarios han estado trabajando sin descanso para salvar el mayor número de vidas posibles y esta vacuna solo aumentará su habilidad para lograrlo", agrega Gates, que aclara que seguirá usando mascarilla -"o dos"- después de recibir la segunda dosis de la vacuna.