"Este es el resultado del bullying, mi hijo estaba peleando una batalla de la que ni yo podía salvarlo. Es real, es silencioso y no hay absolutamente nada que puedas hacer como padre para quitar este dolor tan profundo. No hay señales, solo palabras hirientes de otros que finalmente nos han robado a nuestro Drayke". Con estas palabras arranca el desgarrador testimonio de Samie Hardman, una madre estadounidense que ha perdido a su hijo de 12 años después de que este se suicidara por sufrir acoso escolar.

Su mensaje, compartido en su propia red social junto con varias fotografías en las que aparece el pequeño y su familia, han conmocionado a medio mundo. En algunas de las imágenes se puede ver a las hermanas de Drayke y a sus padres despidiéndose de él en el hospital.

"¿Cómo un niño de 12 años que fue amado ferozmente por todos piensa que la vida es tan difícil que necesita alejarse de ella?", se pregunta la madre, consternada.

Como ella misma relata en su publicación de Instagram, el pequeño era "el mundo" de toda su familia y querido por todos por la "luz que iluminaba a todos" y su "personalidad ingeniosa". "Él es mi niño, la única persona que en un momento dado simplemente se detendría y me daría un abrazo, me diría 100384849 veces al día 'Mamá, simplemente te amo'".

Tras la muerte del pequeño, la progenitora se ha mostrado perdida, sin saber "cómo navegar esta vida" sin su hijo, pero tiene claro que en su memoria quiere "llevar la bondad por bandera". "Mi corazón está destrozado, no sé cómo arreglarlo, o si alguna vez lo haré, pero pasaré cada minuto llevando la bondad por bandera en memoria de mi amigo favorito".

En sus emotivas palabras, Samie también tiene un mensaje para todos aquellos padres que se topen con su publicación: "Abracen a sus hijos, abrácenlos fuertes. Enseñadles a vivir y a amar ferozmente".