El de Messi es el autógrafo más cotizado entre los aficionados del fútbol actual. Pero, en esta ocasión, no va dirigida a ningún seguidor. Es la rúbrica que vincula a Messi con una sociedad offshore de Panamá. Aparece junto a la firma de su padre, y la petición expresa para que su adquisición sea totalmente confidencial.

Los movimientos de la familia Messi en este paraíso fiscal comienzan el 13 de junio de 2013, justo al día siguiente de que la Fiscalía española denunciara al jugador por tres presuntos delitos fiscales. Dieron orden de buscar un gestor para dos sociedades que no aparecen en la denuncia del Ministerio Fiscal.

Este documento demuestra cómo el internacional argentino, a través de su padre y representante, habría cambiado el agente de la sociedad offshore Mega Star Enterprises. Se firma el 23 de junio. Su abogado despeja cualquier tipo de dudas: "Los beneficiarios finales de la sociedad son Jorge Horacio y Lionel Messi".

La empresa tiene a su padre como único accionista. Y no querían que se hiciese público, como pidió su abogado por escrito: "Agradecería me enviaran los documentos que deben ser firmados […], de tal manera que su nombre no quede inscrito en el Registro Público de Panamá". Esta no es la única sociedad con la que los Messi podrían operar desde este paraíso fiscal.

También el 13 de junio, el día después de la denuncia de la Fiscalía, el despacho de abogados del futbolista solicita cambiar al gestor de su empresa Legreeg Corporation. En este caso, no aparece el apellido Messi. El beneficiario de esta sociedad es Iñigo Juárez Gómez; curiosamente, el apoderado de una inmobiliaria que la familia tiene en Barcelona. El jugador del Barça siempre ha negado que se encargue de gestionar su fortuna. Pero los archivos del despacho de abogados panameño Mossack Fonseca parecen decir lo contrario.