El jefe del Ejecutivo y su esposa han sido los primeros en saludar a don Felipe y doña Letizia en el Salón del Trono. Nada más estrecharles la mano, el matrimonio se ha situado a la derecha de los reyes, donde ha permanecido hasta que un miembro del servicio de protocolo de la Casa del Rey les ha pedido que avanzaran para que prosiguiera el saludo de las autoridades que iban a continuación.

En un primer momento, el Gobierno justificó que Sánchez y su esposa se quedaran junto a los reyes porque iba a haber una foto con las máximas autoridades del Estado, según fuentes de Moncloa.

Ante la controversia generada por el episodio, Moncloa ha comunicado que "se remite a las explicaciones públicas" ofrecidas por Zarzuela "en el sentido de que el presidente y su esposa han seguido en todo momento las indicaciones que les ha dado la Casa Real".