El icono de Barcelona ha sido cerrado. En la puerta de la Sagrada Familia se han arremolinado los turistas tras leer en un cartel que este viernes 18 de octubre no ha habido visitas por la concentración que estaba teniendo lugar justo enfrente.

"Compramos el ticket hace más de seis meses a través del sitio web y al llegar aquí hemos visto que estaba todo vallado", cuenta un turista. Precisamente, atónitos se han quedado los turistas a los que les ha pillado dentro el cierre.

Fuera, tras la puerta, se han quedado los manifestantes en una huelga general que empezaba al amanecer en Cataluña con los primeros cortes de tráfico; largas retenciones que han obligado por ejemplo a bajarse del autobús a varios pasajeros.

La AP-7 también ha sido cortada a su paso por la Universidad Autónoma. Y en la Junquera, en Girona, han provocado una larga hilera de camiones. Todas las provincias, como la de Lleida, han sufrido incidencias en el tráfico.

También ha sufrido las consecuencias el Aeropuerto de El Prat, donde se han cancelado 55 vuelos. Muchos pasajeros han llegado con horas de antelación. Y en la estación de Sants ha reinado la tranquiliad, pero con unos servicios mínimos saturados.

En mínimos ha estado también el puerto de Barcelona. Los estibadores han recorrido las calles hasta la plaza Sant Jauma, donde les ha recibido la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Así se ha dado un día en Cataluña con calzadas, calles vacías y poca actividad en la educación y la sanidad.

Insultan y abuchean a Álvarez de Toledo en la Plaza de Sant Jaume y ella les encara