Vox quiere conocer los nombres y apellidos de todos los trabajadores de las unidades de violencia de género del Gobierno de Andalucía. Los ha solicitado a través de una petición en el Parlamento, según ellos, porque muchos no están suficientemente capacitados para su cargo.

"Se están violando sentencias de Altos Tribunales que exigen la colegiación. Los jueces dictan sentencias en base a informes de profesionales no cualificados y altamente ideologizados y de los que depende la libertad de un acusado o el futuro de los niños, afirma Francisco Serrano.

Es la muestra, aseguran, de que lucharán contra cualquier sospecha de corrupción en el Ejecutivo. "Es una petición para fiscalizar y comprobar el destino de las ayudas en los últimos años", defiende Alejandro Hernández, portavoz de Vox en el Parlamento andaluz.

Para la expresidenta andaluza, el único objetivo de Vox es "hacer una purga".Unas críticas a las que se suma Adelante Andalucía, que califica el movimiento de los de "un absoluto despropósito". "Es una actitud enfermiza del juez Serrano que considera que los demás conspiran contra él", asegura Ángela Aguilera, portavoz de Adelante Andalucía.

Desde el Gobierno andaluz, lanzan un mensaje de contundencia. Su vicepresidente insiste en que Vox no les "moverá ni un milímetro".