El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, respaldó la gestión del jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, ante la situación en Cataluña al defender que España es "un gran país" que "debería permanecer unido" y considerar que la independencia sería "una tontería". "Realmente, creo que la gente de Cataluña se quedará en España, y creo que sería una tontería no hacerlo; estamos hablando de quedarse en un país verdaderamente grande, bonito e histórico", añadió el presidente estadounidense.

A cinco días del referéndum que los independentistas pretenden celebrar en Cataluña, este fue el asunto que copó la atención de esa comparecencia ante la prensa tras un almuerzo de trabajo. La respuesta de Trump fue acogida con satisfacción por la delegación española al considerar que deja bien claro el respaldo a la legalidad que defiende el Gobierno.

El presidente de Estados Unidos elogió a España como un país "grandemente admirado". Trump reiteró su solidaridad con España ante los atentados terroristas del pasado mes en Cataluña y, en ese contexto, agradeció la participación de España en la coalición contra Daesh y haber formado a más de 30.000 miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes.

Rajoy informó de que avanzó a Trump la intención de España de elevar su compromiso tras la caída de Mosul con la aportación de un nuevo paquete financiero para la reconstrucción de Irak. Hizo hincapié asimismo en la experiencia española en la lucha contra el terrorismo y consideró que aún hay capacidad de mejora en algunos aspectos.

Donald Trump recibe a Mariano Rajoy en la Casa Blanca

En relación con Corea del Norte, Trump agradeció a Rajoy la decisión de expulsar de España al embajador de ese país y ponerse del lado de Estados Unidos para "aislar ese régimen brutal".

El presidente del Gobierno español resaltó que el desafío de Corea del Norte es "una intolerable violación de la legalidad internacional" y trasladó a Trump el pleno apoyo de su Gobierno al endurecimiento de las sanciones a este país aprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU.

También garantizó que España seguirá presionando para que haya en la UE "una postura común, firme y solidaria" con los Estados Unidos en este asunto.

Venezuela fue otro punto de coincidencia de Rajoy y Trump, quien elogió los esfuerzos de España por el pueblo venezolano y confió en que los socios europeos sancionen el régimen de Nicolás Maduro.

"Los ciudadanos venezolanos sufren pobreza, hambruna y malestar político bajo su régimen socialista opresivo", añadió antes de expresar la esperanza de paz de Estados y Unidos y España para que en Venezuela se restaure la democracia y se libere a los presos políticos.

Rajoy defendió mantener la presión internacional sobre el régimen de Venezuela para lograr su implicación en un proceso negociador dirigido a facilitar una salida pacífica, negociada y democrática a la crisis actual. Al plantearle si estaría de acuerdo con una posible intervención militar en Venezuela tal y como ya ha sugerido Trump, el presidente del Gobierno resaltó que ante lo que está ocurriendo allí "la comunidad internacional no debe andarse con paños calientes".

Trump defendió también en su reunión con Rajoy un comercio internacional "justo y recíproco", felicitó a los empresarios españoles por sus inversiones en Estados Unidos y ofreció a Rajoy trabajar de forma conjunta de cara al futuro. Por su parte, Rajoy calificó de "muy productiva" la reunión y dijo que España y Estados Unidos son dos grandes socios que comparten valores y tienen unas relaciones excelentes que cree que aún tienen potencial en ámbitos como el económico.