El Gobierno ha nombrado al almirante Teodoro López Calderón como nuevo Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), después de que el anterior, el general Miguel Ángel Villarroya, dimitiera este fin de semana tras conocerse que se había vacunado antes de tiempo.

El almirante López Calderón, natural de Cartagena (Murcia), salió de la Academia en el año 1978. Desde entonces ha ocupado numerosos destinos tanto nacionales como internacionales. Ha estado destinado en las fragatas 'Numancia', 'Asturias', 'Extremadura' y Corbeta 'Descubierta'. También estuvo integrado en el Estado Mayor del Mando Norteamericano del Atlántico Sur (USCOMSOLANT).

Según detalla la Armada, entre sus destinos en tierra destacan el de Comandante del Mando de Operaciones, así como, en el mismo Mando, los de Jefe del Estado Mayor y Adjunto para Operaciones al Jefe del Estado Mayor.

Villarroya, presentó su dimisión cese a la ministra de Defensa, Margarita Robles, después hacerse público que él y otros altos cargos militares recibieron la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus, saltándose el protocolo que daba prioridad a otros grupos de riesgo. Según Villarroya, con esta decisión pretende "preservar la imagen de las Fuerzas Armadas".

"El JEMAD puntualiza que, en el cumplimiento de sus obligaciones, ha tomado recientemente decisiones que considera acertadas y que nunca han pretendido aprovecharse de privilegios no justificables, pero que están deteriorando la imagen pública de las FAS y poniendo en duda la honradez del propio General Villarroya", se recoge en una nota de prensa publicada por el Ministerio en el que se exponen los motivos de su dimisión.

Según se ha detallado en el documento, con el "objetivo de no perjudicar esa imagen, y con la conciencia tranquila", ha presentado a Robles su solicitud de cese en sus actuales cometidos como Jefe de Estado Mayor de la Defensa, no sin poner de manifiesto su "actuación al frente del Estado Mayor de la Defensa (EMAD), y al igual que durante sus 45 años de carrera militar", que siempre "ha procurado ser honesta y dominada por el espíritu de servicio y de amor a España".

La decisión de Villarroya se ha producido después de que Margarita Robles le pidiera explicaciones por el hecho de que se le haya administrado la vacuna. La titular de la cartera de Defensa había advertido de que ella no toma las decisiones sobre a qué grupo se les administran primero las vacunas porque no conocía "cómo se estaba desarrollando ese plan de vacunación" en el JEMAD.