La creación de una vacuna es un proceso complejo que requiere de dos condiciones fundamentales: debe ser eficaz y segura. Así, desde que aparece una nueva enfermedad y se identifica al patógeno que la causa hasta que llega al mercado una vacuna fiable puede pasar mucho tiempo.

"El proceso de investigación puede durar entre 5 y 30 años, con un promedio de 10", explica Charo Cambronero, responsable médico de vacunas de GSK. Pero ante una pandemia como la actual estos plazos se acortan. "Teniendo en cuenta la situación de emergencia pueden acelerarse algunos de los episodios", puntualiza Amós García Rojas, presidente de la Asociación Española de Vacunología.

Los expertos estiman que la vacuna contra el COVID-19 podría estar lista en 18 meses.

Por ello se estima que la vacuna contra el COVID-19 podría estar lista en 18 meses. Los expertos apuntan que, aunque se trata de una patógeno nuevo, pertenece a una familia conocida y eso supone una ventaja respecto a la investigación. "Podemos aprovecharnos de las experiencias previas con otros coronavirus", añade Pedro Alsina, director de RRII de Sanofi Pasteur.

Una vez detectado el virus, los investigadores deciden que antígeno puede combatirlo y que otros componentes se le pueden sumar. "Ese es el momento más crítico de todo el proceso porque el antígeno es el principio activo y principal responsable de activar la respuesta inmune protectora", explica a laSexta Charo Cambronero.

Después, antes de pasar a los ensayos con personas, comienzan las pruebas preclínicas con cultivos celulares y con animales. Tal y como señala Pedro Alsina, hay algunas compañías que ya han iniciado los ensayos en humanos de la vacuna contra el coronavirus y "los plazos van de 12 a 18 meses", algo que también ha apuntado la OMS.

Pero, ¿habrá dosis suficientes para abastecer a todos? "Es un reto complejo", apuntan los expertos.

Los órganos reguladores tendrán que comprobar que la vacuna es eficaz y segura antes de comenzar su fabricación a gran escala. Pero, ¿habrá dosis suficientes para abastecer a tantas personas? "Tanto la producción como la distribución a nivel mundial van a suponer un gran reto por su complejidad", responde la responsable médico de GSK.

Una tarea contrarreloj en la que también está trabajando España. El ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, aseguró el pasado viernes que "existe la posibilidad de que los laboratorios españoles encuentren la primera vacuna" contra el COVID-19 y detallaba todos los avances una rueda de prensa telemática.

Los expertos afirman que habrá que vacunar primero a la población de riesgo, al personal sanitario y a otros profesionales que lo necesiten antes.