Salvador Illa comparece este viernes para actualizar la estrategia de vacunación, tras abordar el plan nacional contra el coronavirus con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial de este miércoles.

El Gobierno ha incorporado la vacuna contra el COVID-19 al calendario de vacunación. Será la número 15. El plan de Sanidad para vacunar a la población contra el coronavirus se llevará a cabo en tres fases, ya que las primeras vacunas estarán disponibles en cantidad limitada e irán aumentando progresivamente, y se han establecido 18 grupos.

El ministro de Sanidad ha justificado la elección de estos 18 grupos prioritarios en base a cuatro criterios: el riesgo de mortalidad, el de exposición a la enfermedad, el de transmisión de la enfermedad y el impacto socioeconómico.

El personal sanitario, quienes viven o trabajan en residencia de mayores y las personas con discapacidad serán las primeras que tengan una opción que será voluntaria y gratuita. Para conocer el resto de colectivos preferentes habrá que esperar, pues el ministro ha afirmado que no los dará a conocer hasta que se acerque su turno de vacunación.

"Pensamos que podemos empezar a vacunar en el mes de enero, cuando recibamos las primeras vacunas". El ministro ha detallado que el suministro se realizará en tres batidas en función de la disponibilidad de las vacunas. "La primera etapa será limitada y se producirá de enero a marzo. La segunda, que se permitirá ir aumentando, llegará hasta junio, probablemente". Illa ha apuntado que, será en un tercer envite cuando la campaña logrará "cubrir a todos los grupos prioritarios".

Con él se pretende que una parte sustancial de la población esté inmunizada durante los primeros seis meses de 2021. La estrategia será diseñada por el Gobierno en colaboración con las Comunidades Autónomas, con el objetivo de que no se produzcan diferencias de acceso entre los diferentes territorios. En ese sentido, el ministro ha subrayado que esta vacuna será "igual de segura que todas las que se usan en el país".

- Primera etapa: suministro inicial y muy limitado de dosis de vacunas. Esta etapa, según ha estimado Salvador Illa en rueda de prensa, se desarrollará en enero, febrero y marzo de 2021. Y se vacunará a dos millones y medio de personas.

- Segunda etapa: incremento progresivo del número de vacunas que permitirá ir aumentando el número de personas a vacunar. Será entre marzo y junio, según cálculos de Sanidad.

- Tercera etapa: Aumento en el número de dosis y de vacunas disponibles para cubrir a todos los grupos prioritarios.

En esa primera fase, habrá un grupo prioritario:

1. Residentes y personal sanitario y sociosanitario en residencias de personas mayores y con discapacidad.

2. Personal sanitario de primera línea.

3. Otro personal sanitario y sociosanitario.

4. Personas con discapacidad que requieren intensas medidas de apoyo para desarrollar su vida (grandes dependientes no institucionalizados).

Será voluntaria, gratuita y los ciudadanos sabrán cuál es

A España llegarán unos 140 millones de dosis de acuerdo con los contratos que ya hay firmados entre la Comisión Europea y siete farmacéuticas. Las más cercanas: la vacuna de la Universidad de Oxford con AstraZeneca, la de Pfizer y la de Moderna, la última en cerrarse. En total, el Gobierno calcula que con estas dosis se pueda inmunizar a 80 millones de personas, prácticamente el doble de la población del país.

¿Y el resto de dosis? Según el ministro, España hará "un esfuerzo de solidaridad" para que países de fuera de la Unión Europea puedan disfrutar también de la inoculación y puedan controlar la pandemia en todo el mundo.

Suficiente para 26 millones

Ahora mismo, tal y como ha detallado el ministro y aparece en la Estrategia nacional, España tiene confirmadas más de 52 millones de dosis de las vacunas de Pfizer y de AstraZeneca. Ya que ambas requieren de dos inyecciones (tres o cuatro semanas de diferencia entre dosis), con esto el Gobierno ya tendría garantizado inmunizar a más de 26 millones de españoles, el 55% de la población.

Además, los ciudadanos tendrán derecho a saber cuál es la vacuna que se le ha administrado de la cartera de siete a las que España opta. Según consta en el documento, "todas las personas vacunadas recibirán información adecuada sobre la vacuna administrada y una tarjeta de vacunación, o similar, en la que constará el tipo de vacuna administrada, la fecha de vacunación y la fecha para la segunda dosis, si procede, así como la manera de proceder ante cualquier sospecha de reacción adversa".

Illa ha valorado el "sistema robusto" de vacunación, con una gran tradición en el país. Esta logística, con más de 13.000 puntos de atención, ha permitido que se puedan vacunar a 14 millones de ciudadanos contra la gripe en apenas ocho semanas.

El objetivo es que una gran parte de la población española esté inmunizada en el primer semestre. La primera fase, que incluye a 2,5 millones de españoles considerados de riesgo o de especial protección (mayores en residencias, sanitarios...), se desarrollará durante los tres primeros meses del año, en cuanto lleguen las primeras dosis.

Logística encarrilada

La logística parece encarrilada, aunque lo cierto es que algunos requisitos concretos de las vacunas de Pfizer o Moderna, que requieren conservarse a bajísimas temperaturas, podría suponer una complicación. El ministro, sin embargo, considera que "la logística habitual hace que podamos garantizar que estos temas están resueltos o en vías de resolución".

Por otro lado, y como parte del plan de vacunación, Sanidad pondrá en marcha un plan especial de farmacovigilancia con la intención de hacer un seguimiento de las personas vacunadas y controlar la administración de la segunda dosis. España participará en un estudio europeo con otros siete países en el que se testará la eficacia de la inoculación.