Sanidad estudia los trámites para permitir a las farmacias dispensar pruebas rápidas para detectar la COVID-19. Se trata, por el momento, de un borrador de un Real-Decreto Ley del Ministerio de Sanidad que permitiría a las farmacias, cuando entre en vigor, vender test de antígenos, pruebas de automuestra de saliva y nasales, para detectar el coronavirus sin necesidad de receta médica.

El Ministerio reconoce en el borrador de la nueva norma, que se someterá a audiencia pública hasta el 13 de mayo, que la crisis sanitaria "hace necesario aumentar la capacidad diagnóstica del Sistema Nacional de Salud, con objeto de identificar de forma rápida sospechas de casos positivos, para tomar las medidas adecuadas y así controlar eficazmente la progresión de la pandemia y al mismo tiempo atender a los afectados por la pandemia y ayudar a su recuperación".

Se trata de una medida que el sector farmacéutico lleva reclamando meses, puesto que consideran que podría ser eficaz para detectar más casos y reducir la carga de trabajo de la atención primaria. Además, el colectivo sostiene que la farmacia aporta equidad, ya que pone los test al alcance de todo el mundo, y también seguridad, pues el farmacéutico es un profesional que puede informar al cliente sobre el uso correcto de la prueba y sabe qué hacer con los resultados.

El presidente de la Federación de Asociaciones de Farmacias de Cataluña, Antonio Torres, ha explicado a laSexta que así podrían "colaborar" con el sistema público de salud y "descargarlo" encontrando a los posibles sospechosos de infección.

Después de toda la tramitación legal, como pronto, los ciudadanos podrían disponer de estos test de antígenos o anticuerpos en farmacias a finales del mes de mayo.

Cabe señalar que en algunas regiones, como la Comunidad de Madrid, ya se están realizando test de antígenos en farmacias y clínicas dentales desde hace varios meses, pero siempre con prescripción médica. En concreto, el Servicio Madrileño de Salud envía un SMS a todos aquellos ciudadanos asintomáticos que residan en zonas con alta incidencia para poderse realizar esta prueba de forma gratuita. Otros países del entorno, como Alemania, Francia, Italia, Austria, Holanda y Portugal, ya venden estos test sin necesidad de receta.