El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha hecho autocrítica por primera vez de la gestión de las Navidades durante su segunda comparecencia ante el Congreso para hacer balance del estado de alarma. "No se debió bajar la guardia entonces, en consecuencia no debemos hacerlo ahora", ha dicho el líder del Ejecutivo, evitando caer en el optimismo y autocomplacencia cuando las cifras de la tercera ola van a la baja y hay que evitar a toda costa la cuarta.

Sánchez se comprometió a comparecer cada dos meses para hacer balance del estado de alarma aprobado en octubre hasta mayo. La última vez que acudió a la Cámara baja lo hizo con la tendencia de la segunda curva a la baja, pero la flexibilización de las medidas para permitir las Navidades disparó la tercera ola. Sánchez ha defendido la gestión del Gobierno central y de los autonómicos, reunidos en la Interterritorial, y ha valorado el descenso del 62% de la incidencia acumulada (IA) en las últimas dos semanas.

"El estado de alarma funciona y la cogobernanza funciona", ha subrayado el jefe del Ejecutivo, que ha insistido en que el decreto contiene "medidas suficientes para doblegar la curva", pero que las autoridades delegadas -las Comunidades Autónomas- han de "aplicarlas" y "mantenerlas".

Pedro Sánchez parece invitar a las comunidades a que no se tomen con excesivo optimismo la bajada de los casos de cara a la Semana Santa y evitar que se cometa un nuevo error y se provoque una cuarta ola. Sin embargo, el presidente sí ha querido señalar la "etapa esperanzadora" que ahora comienza, con cinco semanas de casos COVID-19 a la baja en el mundo, entre otras cosas por el arranque de la vacunación.

"2021 va a ser el año de la vacunación y de la recuperación económica y social", ha apuntado el presidente. Para que eso sea posible, Sánchez ha solicitado "unidad" a la oposición: "Pido lo que ofrezco: unidad a todas las fuerzas parlamentarias".

Casado critica las tensiones en la coalición

El presidente del PP, Pablo Casado, ha aprovechado su réplica para criticar algunas ausencias destacadas en los actos conmemorativos del fallido 23-F y también para reprochar a Sánchez que lidere "el gobierno más radical de los últimos 40 años".

"Pide unidad, pero usted no la tiene dentro", ha subrayado, ante los disensos constantes en la coalición.

Casado ha criticado también el anuncio de las ayudas de Sánchez, por lo escaso. A su juicio, "no bastan 11.000 millones, se necesitan al menos 50.000 millones", ha asegurado desde la tribuna de la Cámara baja.

Además, el líder popular le ha pedido a Sánchez que, una vez que termine la pandemia, no bloquee una comisión de investigación en el Congreso que controle la gestión que se ha hecho de la emergencia sanitaria desde el principio. También ha acusado al Gobierno de ocultar las alertas sanitarias que algunos organismos internacionales emitieron a principios del año pasado.

También el líder de Vox, Santiago Abascal, ha arremetido contra la gestión del Gobierno y ha dejado caer la posibilidad de presentar una segunda moción de censura contra Sánchez: "Quizá tendríamos que dar la posibilidad de una segunda moción de censura para que algunos puedan redimirse de su enorme responsabilidad a todos los españoles". Y al líder del PP, le ha espetado: "Señor Casado, qué flaco favor ha hecho usted a su partido y a España diciendo que quiere pactar con Pedro Sánchez como si fuera algo distinto a pactar con Pablo Iglesias, como si no fuera el que ha pactado con EH Bildu y ERC".

Inés Arrimadas, la líder de Ciudadanos, se ha preguntado qué va a pasar en Semana Santa: "¿Vamos a vivir unas navidades 2? ¿Seguiremos teniendo 17 enfoques diferentes? ¿Habrá cuarta ola después de estas fechas si no toman medidas adecuadas? Le pido por favor que no se vuelvan a esconder como en Navidades".

Ha pedido más acuerdos de Estado, y ante las informaciones que apuntan a que el acuerdo del Gobierno y el PP sobre el CGPJ está cerca, ha dicho: "Qué vergüenza de partidos de bipartidismo que solo les interesa repartirse al Estado. Se reparten el Estado pero no acuerdos de Estado".

Sánchez pide a Casado que no politice a los fallecidos

Sánchez ha utilizado su turno de réplica al final para responder a Casado, a quien ha acusado de tener "pocas ganas" y le ha preguntado si su modelo de gestión de la pandemia sería el de Castilla y León o el de Madrid, dos comunidades presididas por el PP pero con medidas totalmente opuestas.

Además, ha recriminado a Casado el uso de las cifras de fallecidos para atacar al partido: "No es forma de hacer política", le ha dicho el presidente al líder de la oposición, a quien ha reprochado su falta de sensibilidad y "muy poca empatía". "Ni con la pandemia o el terrorismo es lícito parapetarse tras los fallecidos. Ganaríamos en convivencia si dejara de utilizar a las víctimas", ha asegurado Sánchez.

A Arrimadas, le ha pedido que traslade un mensaje a Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, donde Cs gobierna con el PP: "Me gustaría que le dijera a la presidenta de la Comunidad de Madrid que igual la desescalada que se está planteando es demasiado rápida, ligera e irresponsable y que tendríamos que ser mucho más prudentes".

Nuevo plan de ayudas

Sánchez ha asegurado que el Gobierno ha movilizado 200.000 millones de euros y ha insistido en que la gestión ha sido efectiva: "Lo hicimos para salvar vidas, empleos y empresas. Protegimos a los trabajadores y trabajadoras con ERTES y respaldamos a las familias con medidas tan inéditas como el IMV".

Al hilo de estas declaraciones, Sánchez ha anunciado que el Gobierno aprobará un paquete de ayudas de 11.000 millones de euros para reforzar la economía de empresas, pymes y autónomos, muy golpeados por la pandemia de coronavirus. De este modo, el objetivo del Ejecutivo es "seguir apoyando a los sectores que eran competitivos antes de la pandemia", como la hostelería, la restauración, el turismo y el pequeño comercio. "Son 11.000 millones para reforzar la solvencia de sus balances y que puedan retomar su actividad económica", ha añadido el presidente al respecto.

Estrategia de vacunación

A diferencia de su anterior comparecencia, el 16 de diciembre de 2020, ahora ya está en marcha la vacunación en España. El plan de vacunación empezó con retrasos debido a un problema de logística de la farmacéutica Pfizer, que atrasó un día la distribución. Pasado ese primer contratiempo, y con las fiestas navideñas de por medio, a principios de año se alcanzó un ritmo muy desigual, ya que algunas comunidades no pararon de inyectar en fines de semana y festivos, mientras que otras sí.

Y otro contratiempo añadido: cuando parecía que se había recuperado el ritmo, llegó el temporal de nieve Filomena, que paralizó durante unos días el centro peninsular. La distribución semanal no se retrasó, pero sí la vacunación en las zonas más afectadas.

AstraZeneca también informó este martes de nuevos retrasos en las entregas de dosis. Según Reuters, no entregará ni la mitad de las acordadas con la UE para el segundo trimestre del año, como ya ocurrió en el primero. Además, con la llegada de AstraZeneca el Ministerio de Sanidad tuvo que repensar la estrategia de vacunación por la recomendación de no administrarse a mayores de 55 años ante la falta de ensayos al respecto. La vacuna británica irá dirigida así a sanitarios de segunda línea, bomberos, policías y profesores que cumplan con estos rangos de edad (entre 18 y 55 años).

Otro de los grupos prioritarios a inmunizar son los mayores de 80 años, que ya están siendo vacunados en varias comunidades autónomas con las otras dos vacunas aprobadas por la UE: Moderna y Pfizer. Las comunidades que aún no lo han hecho, como Madrid, ya han anunciado que comenzarán esta misma semana.

Por el momento, los vacunados con pauta completa superan el 1.200.000 en nuestro país (2,55% de la población), y se espera que a finales de marzo se tenga prácticamente inmunizado al grupo con mayor riesgo en la pandemia, los mayores de 80 años.

La previsión que maneja el Ejecutivo es la de llegar al verano con el 70 % de la población española inmunizada, una inmunización que el organismo alcanza días después de recibir la segunda dosis de la vacuna. Fue el 27 de diciembre el día en el que comenzaron las vacunaciones de forma simbólica en España y en la mayor parte de la Unión Europea. Mientras, en el resto del mundo, el ritmo cambia según los países.