No ha comenzado septiembre y la arena política ya se encuentra en plena ebullición. Tras el final de la misión del Gobierno en la crisis de Afganistán, con la toma de Kabul por parte de los talibanes y la retirada de las fuerzas internacionales, que han apurado hasta el último momento para poder evacuar el mayor número de afganos, la ministra de Defensa ha salido en respuesta, muy dura, a las críticas del líder de la oposición.

Si bien Pablo Casado, presidente del PP, venía reprochando en las últimas horas al Gobierno "celebrar el drama, el horror", Margarita Robles le ha contestado, tajante: "Nadie puede decir que la operación en Afganistán responde al marketing político, ha sido una acción humanitaria".

A pocas horas de haber terminado todo el operativo que desplegó Moncloa para llevar a cabo la misión en el país, el PP corrió a acusar al Gobierno de no haber consensuado y contado con el aval del Congreso la misión. Este lunes, la ministra, en una entrevista en Onda Cero, ha señalado que la comunidad internacional, incluida España, tiene una obligación "política y ética" con Afganistán.

Sobre las palabras de Casado, este lunes, el secretario general del PP, Teodoro García-Egea, ha insistido en el mensaje. Ha asegurado que Sánchez "está celebrando una retirada". "Si Sánchez está celebrando una retirada, no se yo qué estamos celebrando".

Ha criticado que Exteriores haya publicado ya una plaza diplomática para la Embajada de Kabul, tras el cese del embajador hasta ahora. Critica que lo haga "apenas dos días después de la caída de Kabul, pues menuda imagen está dando", y considera que Sánchez debe pedir perdón "por decir que el Ministerio de Defensa sobraba", unas declaraciones del presidente hace tiempo. "Sánchez no puede sacar mucho pecho con Afganistán", ha concluido.

"El Gobierno no se plantea reconocer al régimen talibán"

También el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, en el Congreso ha elogiado el papel de los militares y de la misión que ha evacuado Kabul: "España ha estado a la altura de las circunstancias y ha sido ejemplo de los valores europeos de solidaridad compromiso e igualdad"

Ha asegurado que se mantendrá una vigilancia "estrecha" sobre todo lo que suceda en Afganistán, y ha afirmado que el Gobierno "no se plantea, por supuesto, reconocer al régimen impuesto por la fuerza". "La reflexión que habrá que hacer es si hay que desarrollar contactos operativos con las autoridades de facto para poder sacar a los afganos colaboradores en su labor de cooperación, poder trasladar ayuda humanitaria en beneficio exclusivo de la población y poder garantizar los derechos humanos de los ciudadanos, especialmente de mujeres y niñas", ha añadido.