El Rey Felipe VI ha centrado su discurso de Nochebuena, el sexto desde que asumiera le jefatura del Estado, en la situación política actual, reconociendo a Cataluña como "una seria preocupación"; la falta de empleo, sobre todo entre "nuestros jóvenes"; los movimientos migratorios, la desigualdad laboral entre hombres y mujeres y las víctimas de las últimas inundaciones.

Además, el monarca ha recordado que hace cinco años tuvo "el honor, por primera vez como rey, de felicitar la Navidad y de transmitir un mensaje de afectos y buenos deseos para el nuevo año", así como "un mensaje de compromiso con la vocación de servir a España".

La posible investidura de Sánchez

Felipe VI ha afirmado que "España no puede quedarse inmóvil" tras dos elecciones generales en apenas seis meses y ha instado a los políticos a ponerse de acuerdo en el Congreso de los Diputados para "tomar la decisión más conveniente para el interés general".

"España no puede quedarse inmóvil"

El jefe del Estado ha hecho este llamamiento en plenas negociaciones del PSOE con Unidas Podemos y ERC. "Ahora, después de las elecciones celebradas el pasado 10 de noviembre, nos encontramos inmersos en el procedimiento constitucional previsto para que el Congreso de los Diputados otorgue o deniegue su confianza al candidato propuesto para la Presidencia del Gobierno", ha señalado.

"Así pues, corresponde al Congreso, de acuerdo con nuestra Constitución, tomar la decisión que considere más conveniente para el interés general de todos los españoles", ha destacado el monarca.

El respeto a la Constitución y la convivencia

Como ya hizo en el discurso de Nochebuena del 2018, Felipe VI ha vuelto a hacer alusión a la convivencia, recalcando la necesidad de "integrar nuestras diferencias dentro del respeto a nuestra Constitución, que reconoce la diversidad territorial que nos define y preserva la unidad que nos da fuerza".

"Quiero destacar en primer lugar el deseo de concordia que, gracias a la responsabilidad, a los afectos, la generosidad, al diálogo y al respeto entre personas de ideologías muy diferentes, derribó muros de intolerancia, de rencor y de incomprensión que habían marcado muchos episodios de nuestra historia", ha señalado el monarca.

"Gracias a nuestra Constitución, hemos compartido valores sobre los que fundamentar nuestra convivencia"

Considera, además, que "gracias a nuestra Constitución, hemos compartido a lo largo de los años unos mismos valores sobre los que fundamentar nuestra convivencia, nuestros grandes proyectos comunes y nuestros sentimientos e ideas".

En este sentido, también se ha referido "a la solidez de nuestro Estado", así como al "dinamismo de nuestra sociedad". Y así mismo, ha pedido que no se caiga "en los extremos ni en una autocomplacencia que silencie nuestros errores" o en una "autocrítica destructiva que niegue el gran patrimonio cívico, social y político que hemos acumulado".

El jefe del Estado ha trasladado este mensaje de unidad tras apuntar que "el deterioro de la confianza de muchos ciudadanos en las instituciones, y desde luego Cataluña, son serias preocupaciones que tenemos en España".

"Los desafíos que tenemos por delante no son sencillos pero, como en tantas ocasiones de nuestra historia reciente, estoy convencido de que los superaremos", ha destacado, antes de pedir que "confiemos en nosotros mismos, en nuestra sociedad y en España", manteniéndonos "unidos, sin divisiones ni enfrentamientos".

Los problemas sociales en España

En el discurso navideño del monarca también han tenido cabida los problemas sociales, como los movimientos migratorios, la desigualdad laboral entre los hombres y las mujeres, la emergencia climática o los problemas económicos que sufren muchas familias.

"La nueva era tecnológica y digital, el rumbo de la Unión Europea, los movimientos migratorios, la desigualdad laboral entre hombres y mujeres o la manera de afrontar el cambio climático son cuestiones que están muy presentes y condicionan ya de manera inequívoca nuestras vidas", ha apuntado.

Los movimientos migratorios, la desigualdad o la pobreza, entre los grandes problemas sociales

Además, se ha referido a la falta de empleo, "sobre todo para nuestros jóvenes", y las dificultades económicas de muchas familias, que se encuentran, incluso, en situación de vulnerabilidad. Estos problemas, asegura, "siguen siendo la principal preocupación en nuestro país".

Para el monarca, los problemas sociales anteriormente mencionados, así como los niveles de desigualdad, se han visto agudizados por "la crisis económica".