Felipe VI ha pedido este jueves, al referirse a la guerra en la Franja de Gaza, que se respete el derecho internacional humanitario en Gaza, que se liberen todos los rehenes y que se busque una solución política que reconozca a Palestina como un Estado junto al de Israel. El rey se ha referido al conflicto entre Israel y el grupo palestino de Hamás en la clausura de la VIII Conferencia de Embajadores celebrada en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores con la presencia de su titular, José Manuel Albares, y de unos 130 jefes de legaciones diplomáticas de España en todo el mundo.

Para el monarca, la tragedia que vive Gaza "está sacudiendo la conciencia de la humanidad", al igual que el atentado terrorista cometido por Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre que hizo estallar el conflicto bélico. Ante esta crisis, Felipe ha expresado su condena y el llamamiento a la liberación de todos los rehenes, así como la petición de respetar el derecho internacional y el derecho internacional humanitario. Ha añadido que sin una solución política, que "pasa por el establecimiento del Estado palestino junto a Israel, no será posible parar este ciclo de violencia o impedir que se vuelva a repetir".

La vía de los dos Estados fue -ha recordado el jefe del Estado- la promesa de la Conferencia de Paz de Madrid de 1991, por lo que ha emplazado a la comunidad internacional a "movilizarse para ayudar a las partes a materializarla". Es la primera vez en la que el rey se refiere al conflicto de Oriente Próximo desde el pasado 20 de octubre, cuando lo hizo en su discurso en los Premios Princesa de Asturias de Oviedo. Durante su reinado, Felipe VI ha defendido la solución de los dos Estados en varias ocasiones, aunque desde que estalló la guerra en Gaza no había reafirmado esta posición que defiende el Gobierno.

Respeto al derecho humanitario

Su mensaje llega en la semana del regreso a España la embajadora de Israel, Rodica Radian-Gordon, tras las discrepancias del Gobierno de Benjamín Netanyahu con el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez. Felipe VI ha defendido que la acción exterior de España tenga como bandera "la diplomacia para la paz", que, a su juicio, requiere defender "un orden internacional basado en el pleno respeto de la Carta de Naciones Unidas", así como la promoción del multilateralismo y la solidaridad entre los socios europeos y los aliados euroatlánticos.

En un contexto geopolítico "volátil e incierto" como el actual, la concertación con países amigos y aliados "cobra aún más valor", según el monarca. Por ello, ha subrayado que "la unidad transatlántica es indispensable para preservar esos principios y valores tan preciados y que hoy se encuentran bajo amenaza". Felipe VI ha enfatizado que el mundo está siendo testigo de situaciones que "parecían superadas o que, como la pandemia o la guerra a las puertas de Europa, eran inconcebibles hace tan solo unos años". El rey ha animado a los embajadores españoles a seguir trabajando en "crear entendimiento, de contribuir a la formación de consensos, de preservar y proyectar los valores de tolerancia, solidaridad, pluralismo y respeto a los derechos y a la dignidad de la persona que la sociedad española siempre ha defendido".

En sus palabras de presentación, Albares ha agradecido al rey su "compromiso con la proyección y presencia de España" en el mundo como un país "moderno, democrático, plural y diverso". El ministro ha puesto como ejemplo el viaje que don Felipe va a realizar a Guatemala para estar presente en la ceremonia de toma de posesión del nuevo presidente, Bernardo Arévalo de León, que tendrá lugar este domingo. Albares, que acompañará al rey en este viaje, ha señalado el "liderazgo y apoyo decidido" que ha demostrado España frente a los intentos de pervertir los resultados electorales. "Con su labor permanente en representación de nuestros valores y vocación internacional, contribuye extraordinariamente a que España tenga una voz reconocida y respetada en el mundo", ha subrayado el titular de Exteriores.