Viajamos al pasado para echar un vistazo a las familias de la década de los 90. Era muy habitual que en cada hogar vivieran cuatro, cinco e incluso más personas: padre, madre, abuelos, hijos... En aquella época los hogares tenían, de media, 3,26 individuos y un ajetreo mucho mayor que el actual.

Si avanzamos unos años y nos fijamos en el 2000, la situación es claramente distinta. Por cada hogar, a principios de este siglo, había 2,86 personas, según el promedio nacional que marca el INE. Esa radiografía social muestra cómo las familias y sus casas van cambiando y se van reduciendo. ¿Y qué ocurre hoy, en mayo de de 2024? La evolución ha sido continua y en descenso. Ahora, por hogar, la media se sitúa en 2,5. Es un nivel prácticamente idéntico a la media de la Unión Europea.

De 2 personas: el hogar más frecuente

Según los análisis, el hogar más repetido en nuestro país es el de dos personas. Suponen el 30% del total de hogares en España. Pero hay un fenómeno que destaca y que se acerca a ese porcentaje. Se trata del número de hogares ocupados por una única persona. Esos hogares, con un solo individuo, son ya el 28% del total batiendo también el récord nunca visto hasta ahora. Ese porcentaje significa que de los 48,6 millones de ciudadanos que viven en nuestro país, más de cinco millones y medio viven solos.

Según los sociólogos, ese aumento de hogares unipersonales se debe a un cambio de mentalidad de los ciudadanos en primer lugar. Pero también es el resultado lógico de dos factores fundamentalmente más, según los expertos: el envejecimiento de la población española y el aumento de la cifra de inmigrantes que han llegado a España en los últimos años. De esta forma, ahora es mucho más habitual ver a parejas que deciden vivir por separado y cada uno en su hogar o personas viudas que viven solas en sus últimos años.

Récord de hogares en España

Que existan cada vez más hogares con menos individuos tiene un efecto que el propio INE también resalta. Hoy hay ya más de 19,3 millones de hogares en España. Es un récord que se seguirá batiendo todavía más en los próximos años y no es de extrañar que más pronto que tarde se llega a los 20 millones. Esa subida de unidades familiares tendrá también una consecuencia en la búsqueda de vivienda que se hará más complicada.