Rubalcaba ha vuelto a liderar la ofensiva de su partido contra la ley del aborto. En un acto en Ferraz, el líder socialista se ha reunido con mujeres y médicos para analizar en profundidad el texto de la reforma.
Los socialista consideran que la ley Gallardón responde exclusivamente a presiones de sectores ultraconservadores.
Andalucía ha sido la primera comunidad en declararle oficialmente la guerra a la ley del aborto. La Junta ya ha anunciado que está estudiando como llevarla a los tribunales por minar los derechos de las mujeres.
En el extranjero, la ley Gallardón tampoco gusta y ha conseguido levantar ampollas en tiempo récord. La ministra de igualdad francesa no ha tardado en criticar el nuevo texto a través de su perfil de Twitter. "El derecho a la interrupción voluntaria del embarazo es un derecho de las mujeres y restringirla merma sus derechos", ha dicho.
En una carta enviada al ministro de Justicia, la portavoz del gobierno galo tacha de retroceso la reforma planteada por el PP. Y las cifras lo avalan.
Con la ley que pretende derogar el gobierno, el número de abortos bajó un 5% en 2012. De las 112.000 mujeres que interrumpieron su embarazo, el 90% lo hizo ejerciendo el derecho a decidir sobre su maternidad.
Un derecho que suprime la nueva norma y que abocará a las mujeres al aborto clandestino. De lo que no cabe duda es de que la reforma de Gallardón es la más restrictiva de la democracia.